TEATRO.

El teatro para muchos jóvenes es una práctica de diversión en la que de un modo diferente nos lo pasamos bien.

El profesor tiene semejanzas con los actores ya que son capaces de expresarse de cara al público, o a los alumnos, "interpretando un papel". El teatro puede ayudarte a desempeñar el papel de profesor con mayor facilidad ya que si haces teatro el miedo escénico tan famoso desaparecerá y no tendrás problemas a la hora de enfrentarte a tus alumnos.

Para ser actor también tienes que dominar tus nervios y saber cuándo tienes que estar tranquilo, eso es muy importante a la hora de ser profesor ya que podrás transmitir esa tranquilidad a los niños.

Otro apartado importante es el ejercicio de actuar. Un profesor tiene que saber actuar de cara a los niños porque se puede dar la situación de que el profesor esté triste o enfadado por los motivos que sean y no tienen que ser los niños quiénes lo tienen que pagar, sino rehacerse y actuar dando la mejor cara que pueda a sus alumnos.

Y por último, pero no menos importante, la improvisación. Un actor tiene que saber improvisar por si no se acuerda de su guión u otro compañero se va de escena y tiene que continuar él. Un profesor también tiene que saber improvisar ya que nos enfrentamos a unos niños que estarán constantemente haciendo preguntas y poniéndote en situaciones a veces adversas y tienes que saber salir del paso.